En diciembre de 2023 fue el cierre del primer año de la iniciativa que busca fomentar el reconocimiento de la identidad originaria desde la primera infancia, a cargo de la Sección Regional de La Araucanía, de la Subdirección Nacional de Pueblos Originarios. Fueron 178 los participantes de entre 6 y 12 años, de seis escuelas de la región, pertenecientes a las comunas de Temuco, Lautaro y Padre Las Casas. Recientemente fue estrenado el video que recoge una memoria audiovisual de este innovador proyecto pedagógico.

Los recintos educacionales seleccionados para participar de la iniciativa piloto fueron tanto rurales como urbanos. En Temuco se llevó a cabo en las escuelas Boyeco y Los Trigales, en Lautaro la Escuela N° 6 de Lautaro y Vega Larga, mientras que en Padre Las Casas fue en los establecimientos Guido Beck de Ramberga y San Pedro Rapa.

El periodo de trabajo, iniciado en agosto de 2023, complementó los lenguajes y las expresiones de arte tradicional a través de la realización de clases en mapuzugun y de la ejecución de proyectos pedagógicos de telar, cerámica y música. Las actividades que se sumaron a la malla curricular estuvieron a cargo de educadores tradicionales junto a los docentes de los establecimientos, con el propósito de que la transmisión de conocimientos fuera a través de intervenciones artísticas.

La iniciativa empezó desde las nociones básicas, como entender qué conocían los estudiantes en relación a los trabajos que harían antes de empezar los pilotos. En las escuelas que eligieron trabajar el ayekan (música) se motivó la práctica y ejecución instrumental, a la vez que se interpretaron canciones en mapuzugun, lo que colaboró al proceso de revitalización lingüística. Para aquellos recintos donde se optó por el witxal (telar mapuche) se entregaron los insumos con los cuales, además de fabricar su propio telar y conocer nuevos conceptos, los estudiantes aprendieron su significado e historia dentro del mundo mapuche. Por último, en los establecimientos donde se escogió el wizüf (cerámica) se explicó a los niños y niñas las técnicas de elaboración de metawe (cántaro), además se desarrolló un trabajo colaborativo y se enseñaron palabras nuevas en la lengua originaria.

Dentro del proceso, se contó además, con una salida pedagógica para complementar el trabajo en aula. Como etapa final se realizó en Temuco, en el mes de diciembre, un intercambio de saberes entre escuelas. Los seis establecimientos participantes asistieron a una jornada, donde cada curso presentó lo que habían aprendido y/o desarrollado durante la ejecución de las clases.

“Es fundamental trabajar con los niños porque la cultura tradicional mapuche ya no se está transmitiendo en los círculos familiares, especialmente la lengua”, comentó el Subdirector Nacional de Pueblos Originarios, José Ancan, durante la jornada de cierre.

El evento contó con presentaciones musicales, una muestra de los trabajos desarrollados durante las clases de wizüf y ngerekan (tejido), y una exposición de pinturas realizadas en una mediación artística cultural. Además, en la instancia de cierre se hizo entrega de certificados de participación a los estudiantes.

La artista y educadora tradicional, Awiñmañ Paillal, recalcó la importancia de este tipo de proyectos en el compromiso de mantener vivos los trabajos mapuche: “ojalá para futuro esto no sea solo un proyecto, sino que esté integrado en la malla curricular en toda La Araucanía”, señaló.

Este primer piloto fue posible gracias al financiamiento de Acciones Culturales Complementarias, fondo concursable del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural. Este 2024 se adjudicó el fondo por segundo año consecutivo para implementarlo en dos establecimientos nuevos, junto a las mismas escuelas del ciclo anterior. Se prevé que serán 230 los menores que participen de la iniciativa.

El video que registra la implementación de dicho proyecto puede verse aquí.